Nuestra startup EcoGlu nació del deseo profundo de reconectar con lo natural y ofrecer una alternativa consciente en el cuidado personal. Todo comenzó con una idea sencilla: crear jabones artesanales que no solo cuidaran la piel, sino también al planeta. Inspirados por la riqueza de los ingredientes naturales y el poder de las plantas, empezamos a experimentar en pequeños lotes, combinando aromas puros, texturas suaves y fórmulas amigables con el medio ambiente.
Con el tiempo, EcoGlu se convirtió en mucho más que una marca de jabones. Se transformó en una comunidad que valora lo artesanal, lo natural y lo auténtico. Nos sentimos orgullosos de acompañar a personas que buscan una rutina de cuidado más consciente, libre de químicos agresivos y llena de reconfortantes aromas.
Desde nuestros primeros prototipos, tuvimos claro que cada jabón debía contar una historia. Una historia de bienestar, de respeto por la naturaleza y de amor por los pequeños detalles. Por eso, seleccionamos cuidadosamente cada ingrediente, desde aceites esenciales hasta arcillas y extractos botánicos, priorizando siempre la calidad. Cada barra de EcoGlu es elaborada a mano, con dedicación y bajo procesos responsables que reflejan nuestra esencia.
Hoy seguimos creciendo con la misma pasión del primer día, impulsados por el compromiso de seguir creando productos honestos y llenos de vida. Porque creemos que cuidar de tu piel también es cuidar del planeta, y en cada jabón EcoGlu llevamos ese mensaje con cariño y responsabilidad.
Todos nuestros productos son de origen 98-100% natural y están elaborados con los mejores ingredientes que la Naturaleza tiene para ofrecer.
No hay nada malo. Tenemos una lista de ingredientes basura que se encuentran en productos de cuidado personal genéricos que nosotros nunca usamos.
Formulados para hombres y mujeres, nuestros productos funcionan al más alto nivel y presentan aromas únicos.